La presencia de dos Delegados del Gobierno Federal con los periodistas de la Mesa Cancún, podría clarificar lo que hace -o no hace- la Cuarta Transformación (4T) en Sonora.
El tabasqueño Máximo Moscoso Pintado, quien ha ejercido en seis ocasiones la representación de la Federación para diferentes dependencias en varios estados, despacha ahora en las oficinas de la Secretaría de Gobernación ubicadas en Hermosillo.
Reunido con el grupo de columnistas y opinadores políticos encabezados por el empresario Carlos Rodríguez Pérez, el experimentado funcionario lamentó que en Sonora, se supone, despachan 59 Delegados; «pero de los que casi nadie sabe lo qué están haciendo», señaló.
«Hay 23 que no se sabe quiénes son», expresó al aclarar que, en su caso, «encontré una Delegación acéfala, porque la Secretaría de Gobernación está organizándose; y yo no puedo venir a mentir a esta mesa».
Obvio que estas palabras provocaron el extrañamiento no solo de los periodistas e invitados reunidos allí; sino también de los ciudadanos que se enteraron de sus declaraciones, las cuales rompen el tradicional servilismo de los funcionarios del pasado.
Y eso a pesar que, el tabasqueño también ejerció funciones públicas en sexenios priistas y panistas.
Prueba de ello es que, de las seis Delegaciones que ha ocupado, tres de ellas han sido gracias a la amistad con el ahora gobernador de Sonora, Alfonso Durazo Montaño.
De allí, su lealtad y gratitud.
Afirmó que, en el papel que ejercen los Delegados Federales en cualquier estado del país, siempre debe haber una comunicación muy estrecha con su respectivo Mandatario Estatal.
«Mi papel es hacer enlace con el Gobernador», reiteró, «excepto que voy a hacer enlaces con la Marina, el Ejército, Bienestar, Guardia Nacional y la Secretaría de Hacienda. Porque en la medida que podamos ayudar, así es como vamos a intervenir».
En lo personal este reportero piensa que, en otros sexenios, estas revelaciones hubieran causado manifestaciones de inconformidad de sus correligionarios ante lo que pudiera considerarse como fuego amigo.
Sin embargo, por la seguridad que muestra Moscoso Pintado, se podría decir que es un funcionario que trae «power».
Y no solo de la Federación; sino también del Estado.
Siguiente comentario.
Una semana después, en el encuentro por separado que tuvo el Delegado del Infonavit con los periodistas de la Mesa Cancún, habló de varias situaciones que se registran con la vivienda de interés social en Sonora.
Vladimir Barboza Vásquez, reconoció que sí existe un rezago mayor a las 170 mil viviendas que ha declarado el dirigente estatal de la Confederación de Trabajadores de México (CTM), Javier Villarreal Gámez; por lo que ya se tiene un plan de ir construyendo y asignando a los solicitantes, un stock de 15 mil cada año.
Aclaró que los tres motivos principales por los cuales se dieron estos problemas, desde hace aproximadamente diez años, son:
Primeramente, por la sobreregulación de los trámites; luego por el encarecimiento de la tierra -en su mayoría por parte de los acaparadores-; y finalmente, por la escasa inversión en infraestructura de desarrollo (como son la falta de red de agua potable y alcantarillado, los pocos accesos viales, la no existencia de planteles escolares, los escasos comercios en el sector, etcétera).
Reveló que, a diferencia de otros estados del país, los precios de las viviendas de interés social no han subido tanto en Sonora; y que la cartera vencida tampoco es tan severa, ya que se han reestructurado alrededor de 80 mil créditos.
Barboza Vásquez informó que en cumplimiento al programa «Aliados por la Vivienda», el Gobierno del Estado se coordinará con la Federación y concretamente con el Infonavit, para rescatar y reasignar a la clase trabajadora las casas abandonadas -que por lo general han sido vandalizadas-.
Según la estimación que se tiene, son alrededor de 15 mil casas con estas características en Sonora, correspondiendo casi la tercera parte a Hermosillo.
Otro comentario.
Las intensas lluvias que han azotado en Sonora durante los últimos días, han evidenciado la mala calidad de nuestra planeación urbana.
Y con ello las millonarias inversiones que literalmente se fueron por los arroyos, y que sirvieron para fortalecer la corrupción en todos los niveles de gobierno emanados de diferentes partidos políticos.
Ciudades vulnerables a los torrenciales como Guaymas, Empalme y otras del sur de la entidad, tienen ahora inundaciones que se debe mitigar de manera urgente para volver a las actividades normales.
Obvio que ante las necesidades económicas por las que pasan actualmente los ayuntamientos, tienen la necesidad de solicitar adelanto de sus participaciones estatales y es por ello que, en encuentros personales con el gobernador Alfonso Durazo Montaño, es probable que los Alcaldes no desaprovechan la oportunidad para manifestar sus peticiones de manera verbal.
En el recorrido del pasado fin de semana del Mandatario Estatal y del presidente Andrés Manuel López Obrador, por Sonora, se pudieron haber visto este tipo de ejemplos.
Donde no solo funcionarios públicos le pudieron haber hecho esta petición a Durazo Montaño y quien quite a López Obrador; sino personas que tienen la necesidad de resolver algún problema en particular.
Hermosillo, como ha sido costumbre en los últimos 30 años, no quedó exento de sufrir los estragos en su pavimentación asfáltica; lo cual nos comprueba la mala calidad de los materiales utilizados por constructores que contaron con la complicidad de autoridades municipales y hasta estatales, cuando estos últimos hacían alguna inversión urbana.
Un claro, pero mal ejemplo de lo que estamos escribiendo, podrían ser las malas condiciones del puente emblemático del Plan Sonora Proyecta que tantas veces hemos comentado y qu.e todavía sigue en reparación.
Con las respectivas molestias para los automovilistas.
Por supuesto.
Nos vemos en la siguiente columna.
