Los mexicanos sabemos que la mejor época del PRD como partido político en la mayoría de los estados de nuestro país, fue cuando la presidencia del Comité Ejecutivo Nacional (CEN) la encabezó Andrés Manuel López Obrador.
En Sonora, para no ir muy lejos -y precisar en lo que nos atañe-, durante los trienios comprendidos de 1997 al 2000 y del 2000 al 2003, los colores negro amarillos gobernaron el 50% de la población y tuvieron una excelente representatividad de sus Diputados Locales en el Congreso del Estado.
López Obrador, quien dirigió a este partido de 1996 a 1999, dejó un excelente saldo a favor de sus correligionarios y muchas simpatías entre las comunidades que empezaron a escuchar su famosa frase de «primero los pobres»; con lo cual creció la filosofía izquierdista en México.
Para mala fortuna de su partido, en ese mismo año el tabasqueño renunció y empezó su campaña rumbo a la Jefatura del Gobierno de la Ciudad de México, la cual ganó en el 2000 y que también sirvió para iniciar la construcción de su proyecto a la Presidencia de la República que hoy detenta.
En ese lejano 1997, la Legislatura sonorense en general empezó a verse como un recinto de políticos no muy conocidos, pero que al expresarse en tribuna se notaba la preparación académica y de campo que traían en su currículum.
Principalmente los que venían del Partido de la Revolución Democrática (PRD), que para ese entonces apenas cumplía diez años de existencia, desde que lo fundó a finales de los 80’s Cuauhtémoc Cárdenas, Porfirio Muñoz Ledo y compañía.
Diputados letrados como Juan Manuel Avila Félix, Carlos Navarro López, José Guadalupe Curiel, Alfonso Valenzuela Segura, Olegario Carrillo, Isabel Cristina Murrieta, Ildelisa González, Patricia Patiño y otros perredistas brillantes en su mayoría, ocuparon curules en el Congreso del Estado a partir de 1997 y otros prosiguieron en el 2000.
Sirviendo este puesto legislativo, incluso, como plataforma para algunos que se regresaron a sus lugares de origen como Presidentes Municipales o que de plano volaron a la Ciudad de México como Legisladores Federales o asumieron un puesto administrativo importante.
En la lista de Diputados de izquierda no debemos omitir a Francisco Hernández Espinoza, Jesús Avila Godoy, René Noriega, José Ramón Fernández, Heliodoro Pacheco y otros.
Ahora, en el PRD de Sonora, las cosas son muy diferentes.
La alianza conformada hace menos de dos años con el PRI y el PAN, al parecer no dejó muy buenos resultados y por lo que se ve, los perredistas han sido los menos favorecidos en la cuestión electoral y en la colocación de perfiles en los pocos puestos de gobiernos que les dejó Morena.
Joel Francisco Ramírez Bobadilla, presidente del también conocido como «Sol Azteca» en Sonora, confirmó la apreciación que escribió este juglar líneas arriba, al manifestar que «fue una mala negociación porque no tuvimos candidatos propios… por la premura del tiempo».
Sentado en la reunión semanal con los periodistas de la Mesa Cancún, reconoció que en los pocos -pero muy buenos, dijo- resultados que se obtuvieron con ese acuerdo entre los partidos políticos más viejos de México, se encuentra el hecho de ser gobierno de coalición en Hermosillo.
Además de contar, también en la capital del estado, con un regidor perredista; y dos más en los municipios de Puerto Peñasco y Nogales; incluyendo la Alcaldía de Bacoachi.
Sobre la diputada Alma Manuela Higuera Esquer, que se fue de su partido a Morena -dejando sin representación legislativa al PRD-, dijo lo mismo que dicen todos los dirigentes que han sido afectados con la misma decisión.
Que regrese, pues, la curul, ya que no le pertenece a ella; sino al partido, porque llegó por representación proporcional y no por mayoría.
«La Diputada nomás se fue y me dejó una carta», añadió, «no votaron por ella; sino por el partido (PRD)».
Al dejar abierta la posibilidad de repetir una alianza con el PRI, el PAN u otro organismo político; manifestó una expresión de extrañeza, ya que dijo saber que en los estatutos de Morena está prohibido hacer alianzas con «El Sol Azteca».
Para las elecciones del 2024 tendremos candidatos para todos los puestos públicos, expresó más o menos con esas palabras; refiriéndose a que ahora serán más estrictos en aceptar y ofrecer propuestas y que realmente tengan probabilidades de ganar.
A pregunta expresa de uno de los viejos reporteros de la Mesa Cancún, respondió que en verdad sí han sido una verdadera oposición, «pero nos ha faltado difundirnos más».
Siguiente comentario.
En más de dirigentes partidistas, otro que también se presentó ante este grupo de periodistas, fue el dirigente de Movimiento Ciudadano (MC) en Sonora, Jesús Manuel Scott Sánchez, quien a juicio de un servidor, lo más interesante que dijo fue la sugerencia de que en la Mesa de Seguridad para la Construcción de la Paz en nuestro estado, se integraran miembros de partidos políticos y del sector empresarial.
Porque de esa manera, hizo entender, se tomaría en cuenta el pulso de lo que sucede realmente en las calles y no solamente de lo que perciben los funcionarios y elementos de las corporaciones policiales o militares convocados.
Sobre las expectativas rumbo al proceso electoral del 2024, el dirigente confirmó que siguen con la idea de ir con candidatos propios y no en alianzas con otros partidos; ya sea en contiendas locales y federales.
Confirmó, de hecho, la inminente candidatura de Ernesto «Pato» De Lucas al Senado de la República, la cual reforzará al resto de los candidatos en diferentes municipios y distritos locales y federales.
Al igual que otros dirigentes partidistas, afirmó que Movimiento Ciudadano es la única oposición realmente en Sonora,
Prueba de ello, añadió, es que MC fue la única bancada en el Congreso del Estado que se opuso a la aprobación del presupuesto 2023 y al refinanciamiento de la deuda pública estatal.
Bueno, amigos.
Por hoy es todo.
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